El Lunes Santo no presentaba un aspecto alentador, el cielo estaba negro y los pronósticos no eran buenos. Pero a las 4 de la tarde un gran claro sobre el Zaidín dejaba ver el tan anhelado Sol, y las puertas del Corpus Christi se abrían para regalarle a Granada a su Señor del Trabajo y su Virgen de la Luz. Un año más asistíamos a una emocionante salida envuelta en el calor y la devoción de un barrio que pone sus esperanzas más que nunca en sus Titulares.
Pero esa lluvia se hizo más fuerte estando la Cofradía del Trabajo en Carrera Oficial por lo que aceleró su paso a la Santa Iglesia Catedral para después regresar con sus pasos cubiertos por plásticos al igual que ocurriera el año pasado.
Una hora más tarde, el Huerto decidía volver a la calle y ésta vez si que pudo salir el cortejo completo que acortó por Santiago, pero de nuevo estando el misterio a la altura de la Calle Varela y el palio de la Amargura en Plaza Fortuny la lluvia arreciaba con fuerza, lo que motivó un nuevo regreso apresurado. En nuestras retinas quedaron estampas insólitas como la Virgen de la Amargura llegando antes que el Señor del Huerto , pero al menos el agua nos concedía una tregua para disfrutar de un bonito regreso
Mucha es la buena gente que se pone en la calle el Lunes Santo con sus Titulares, desde aquí animaros a todos aquellos los que tenéis un hueco en nuestros corazones. Un año pasa muy rápido y más con "Magna" de por medio.
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