Que en los tiempos que corren, en los que la Fe ha sido relegada a un segundo plano e incluso en ocasiones mal vista por diversos colectivos, que una Hermandad consiga salir adelante e incorporarse a la nómina de una jornada de Semana Santa, es señal de que pese a todo.. estamos vivos.
En el Miercóles Santo de 2012, el Santísimo Cristo de la Piedad y María Santísima de Vida, Esperanza y Dulzura Nuestra, conseguía llegar a la Carrera Oficial cordobesa, tras no poder hacerlo el año anterior por las inclemencias meteorológicas y así se plantaba en las Tendillas.
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